Un fantástico reloj el Breitling chronomat B01

Un reloj que nunca pasa de moda, el Breitling Chronomat B01

  En este post queremos hacer referencia a un reloj que particularmente nos encanta, el Breitling Chronomat B01 y aunque no es precisamente actual es un tipo de reloj que nunca pasa de moda. Precisamente el año que conmemoró su 125 aniversario, Breitling presentó su propio movimiento de cronógrafo automático, el calibre B01, desarrollado íntegramente en sus talleres de La Chaux-de-Fonds, donde mantiene uno de los laboratorios mejor equipados de la industria relojera. Una proeza técnica que le franquea la entrada al restringido círculo de las casas relojeras capaces de crear sus mecanismos. Lo cierto es que la relación de Breitling con los cronógrafos es larga y fructífera. Ya en 1915, Gastón Breitling, hijo del fundador, inventa el primer pulsador independiente, al dotar a uno de los primeros cronógrafos de pulsera de un botón distinto de la corona para las tres funciones del cronógrafo (puesta en marcha, parada, vuelta a cero). En 1923 perfecciona este sistema separando las funciones de puesta en marcha/parada, realizadas por medio del pulsador posicionado a las 2h, de la de vuelta a cero, activada mediante la corona. Una década después, Willy Breitling, tercera generación, termina de dar al cronógrafo su configuración actual al inventar el segundo pulsador independiente, destinado exclusivamente a la función de vuelta a cero. En 1969, la marca de Grenchen logra un gran reto al crear el primer mecanismo de cronógrafo de carga automática, el mítico calibre 11, más conocido como Chrono-Matic. Hazañas a las que ahora se suma el B01. Poderoso y preciso, el B01 es un cronógrafo de rueda de pilares, que permite una reserva de marcha de más de 70 horas, merecedor del certificado oficial de cronómetro del COSC, un codiciado sello que sólo posen el 5% de los relojes fabricados en Suiza.

Dispone además de un dispositivo patentado de autocentraje de los martillos de vuelta a cero que suprime el tradicional retoque efectuado individualmente por el relojero en cada mecanismo. Está dotado con un calendario con cambio instantáneo de la fecha, que puede corregirse en cualquier momento sin deteriorar el mecanismo. Su inteligente construcción, de tipo integrado pero con una cierta modularidad, evita los daños de un uso inadecuado y ofrece muchas ventajas tanto en el ensamblaje como en su mantenimiento posterior. Para garantizar una auténtica fiabilidad a gran escala, Breitling ha decidido innovar sus métodos de fabricación. "El objetivo es racionalizar la producción y confiar a las máquinas todas las operaciones que garanticen resultados superiores a las realizadas por la mano del hombre", explican fuentes autorizadas.

Un proceso automatizado de fabricación

Inspirándose en un concepto high-tech utilizado en otros sectores punteros y adaptándolo al ámbito relojero, la marca ha desarrollado una fórmula de cadena de producción industrial completamente diferente a la forma tradicional de ensamblar los mecanismos. Cada calibre va colocado en una especie de lanzadera y seguido individualmente por un logicial ultrasofisticado que lo dirige automáticamente hasta el puesto adecuado, a lo largo de un recorrido donde alternan los puestos totalmente automatizados y los que exigen una intervención manual. Todas las etapas del ajuste están integradas también en este proceso, y al abandonar la cadena, cada B01 está listo para afrontar los rigurosos test del COSC. Diseñado para ofrecer una gran precisión, habilidad y funcionalidad, el nuevo Chronomat B01. con su flamante movimiento, expresa perfectamente el espíritu de los "instrumentos para profesionales" de esta marca.

Características principales

Robusta, resistente a los golpes y estanca hasta 500 metros de profundidad, la caja, con un diámetro de 43,5 mn, ha sido rediseñada, alargando su perfil para adaptarse mejor a la muñeca, a lo que contribuyen las asas móviles que la unen al brazalete. El bisel giratorio unidireccional dispone de cifras árabes grabadas que proporcionan una excelente legibilidad a la hora de medir el tiempo de un vuelo o de una inmersión. Bien con números romanos o índices, las esferas, protegidas por un cristal zafiro abombado y antirreflectante por las dos caras, despliegan una casi infinita gama de colores, matices y materiales. Los salientes laterales de la corona y las bridas de protección de los pulsadores actúan como una auténtica coraza contra los golpes. El Chronomat B01 está disponible en cuatro versiones con múltiples combinaciones: Íntegramente en acero; en acero con bisel con 4 índices en oro macizo; en acero con todo el bisel, la corona y los pulsadores en oro; o completamente en oro de 18 quilates. A cual de todos mas bonito, espero que estos relojes os gusten tanto como a nosotros.